AVERIGUA (EN MINUTOS) TUS NIVELES DE ESTRÉS

Si estás forzando la máquina sin saber dónde están tus límites, podrías estar perdiendo más que energía.

Antes de quemarte o caer en un problema físico, mide tus niveles de estrés en menos de 6 minutos.
Decide de manera inteligente, si hoy es un día para apretar, o para parar y recargar.

Deja tu correo y recibe la herramienta que uso con emprendedores, directivos y deportistas, que no se pueden permitir cometer muchos errores.

Soy de los tuyos.

No soy de ese tipo de personas que está deseando que el médico le dé la baja, vivir de una subvención o que le toque la lotería.

 

No sé si sabrás que, la mayoría de emprendedores o cargos empresariales, tienen tendencia a no pedir bajas laborales. Pero cuando estas se dan, suelen ser mucho más largas y complicadas (98 días con relación a los 38 de media, de los asalariados).

Esto puede ser un desastre.

Para ti y tus expectativas laborales y económicas.

 

¿Y sabes cuál es la principal razón?

No estar preparado para el nivel de exigencia que necesita tu actividad diaria.

Debes saber que la mayoría de problemas físicos, no son lesiones. Son disfunciones que pueden “arreglarse” de manera relativamente simple. Antes de complicarse, claro…

Es evidente.

No es la mala suerte, ni tu genética, ni la tiranía y los privilegios de funcionarios, políticos o sindicalistas. Es no entender que tu cuerpo no está preparado para seguir el ritmo que le quieres imponer.

 

Entra en una comunidad de cientos de personas que ya han aprendido a ser productivos, sin arriesgar, con una herramienta que te va a dar luz verde o frenarte.

En menos de 6 minutos, sin analíticas ni visitas al médico.

Es tuya si dejas tu correo aquí.

 

Me presento

“Una cosa, no has puesto tu currículum”.

No, eso es lo que hace todo el mundo. 

Como se diría en la jerga deportiva, se habla en el campo.

Pero quédate tranquilo, todo en orden legalmente. Lo que es más importante, es que entiendas que puedo serte de gran ayuda si estás pasando por un momento complicado físicamente. Mi misión es ayudarte a volver a tu rutina, en el mínimo de tiempo posible.

 

Como siempre digo,

“Si en una sesión no soy capaz de ayudarte, es una obligación profesional y moral comunicártelo”.

Se dice, se comenta…

 

Estas son algunas de las cosas que me escriben, de forma espontánea, personas muy diferentes entre sí.

Con edades diversas.

Que hacen actividades diferentes, tienen trabajos muy variados y ven la vida de diferentes formas. Pero a todos les une una meta, dejar de sentir dolor y volver a vivir con normalidad.

Pol (21)

“Estoy super bien y super contento Alex. Eres un máquina.

Al principio no podía hacer dominadas ni nada y ahora últimamente hago 10 o 15 del tirón. Sin ningún dolor.

Ya puedo levantar el brazo a la misma altura que el otro.

Así que todo bien.”

 

(Este chico de 20 años, llevaba meses sin poder ir al gimnasio y hacer ejercicio sin dolor en el hombro)

 

Silvia (49)

“Hola Alex, el otro dia no me acordé de informarte de una cosa… mira, mira…”

 

(Silvia me envió un video cogiendo la bicicleta después de años sin poder subirse en una, por culpa de una mala recuperación de rodillas.)

 

Josep (74) 

“Estoy mejor. Seguimos adelante.

El dolor es menor y cada semana se irá reduciendo.

El otro dia entrando en un restaurante, llevaba una caja en las manos y no vi el escalón. Tropecé y fui capaz de equilibrarme sin caer.

Menos mal que estamos haciendo este trabajo. Antes no era capaz de hacer esto.

Gracias.”

 

 

(Josep es una persona que ha sido activa durante toda su vida, ha hecho diferentes deportes de competición. Después de una serie de operaciones de columna, le diagnosticaron síntomas de Parkinson. Su calidad de vida ha mejorado mucho desde que trabaja su forma física.)

 

Marc (36) 

Alex, ¡pasé las pruebas de mosso!. La agilidad bien, era lo que más miedo me daba, saqué un 4. Así que renuncié a la segunda oportunidad. Por lo que hemos estado hablando.

Todo sin dolor, genial, aunque tampoco he querido arriesgar mucho.” 

 

(Marc entró con un problema grave de pubalgia, un dolor en el aductor que da bastantes problemas, sobre todo en el caso de actividades rápidas y con cambios de dirección. Después de trabajar durante algunos meses, conseguimos su objetivo. Pasar las pruebas de entrada a un cuerpo policial, sin prácticamente dolor.)

 

No sé qué es lo que necesitas.

Tampoco yo lo sabía, antes de que estas personas me lo explicasen.

Es lo bonito de mi profesión.